Los alumnos y comunidad en general del establecimiento educacional San Anfeli no pudieron ingresar al recinto para cumplir su jornada escolar porque se encontraba con sus puertas cerradas en sus dos sedes ubicadas en la calle Mena e Ibáñez de la comuna de Quilpué.
Sin ninguna información oficial se encontró la comunidad escolar del Colegio Inglés San Anfeli de Quilpué que, durante la presente jornada, no pudo ingresar al recinto para desarrollar las actividades educativas, como de costumbre, en sus dos sedes ubicadas en las calles Mena y Carlos Ibáñez de la mencionada comuna. El gobernador de la provincia de Marga Marga, Christian Cárdenas, se apersonó en una de las direcciones del establecimiento para interiorizarse de la situación de los estudiantes, por tal motivo, se reunió con los profesores, apoderados y el director provincial de Educación, José Jiménez, para buscar solución del problema.
El gobernador de Marga Marga, Christian Cárdenas, explicó tras la reunión que “este es un colegio particular subvencionado en el cual, según antecedentes que nos relatan tanto profesores como apoderados, está con serios problemas económicos y se decidió cerrarlo de un día para otro. Lo grave es que acá hay varios alumnos que van a quedar sin estudiar, sobre todo pensando que estamos recién en el primer semestre de este 2017”.
En esa línea, la autoridad provincial enfatizó que la prioridad es encontrar solución urgente a los alumnos de dicho establecimiento.
“Tuvimos una reunión inmediata con el director provincial de Educación, don José Jiménez, vamos a hacer todas las acciones que estén a nuestro alcance, sobre todo desde el Estado de Chile, parar que podamos darles una solución a lo que está ocurriendo con los alumnos que, hoy día es nuestra prioridad, sobre todo para ver cuáles van a ser los pasos a seguir para que estas personas puedan seguir estudiando”, destacó el gobernador.
Por su parte, el director provincial de Educación, José Jiménez, señaló que buscarán comunicarse que la sostenedora del establecimiento para averiguar las motivaciones de la medida.
“En la mesa se sentaron profesores y apoderados, yo voy a comunicarme con la sostenedora para que me explique cuáles son las razones para que ella tenga el colegio cerrado. Voy a mediar y tratar, dentro de las facultades que tengo, que el colegio siga funcionando. Una vez que tenga los antecedentes que ella me dé, vamos a tratar de apoyarla, dentro de las competencias que tenemos, de manera que, si hay algunos problemas que podamos ayudar a resolverlos, podamos hacerlo. Ahora, cuando un colegio se cierra, se debe avisar durante el mes de junio del año anterior, indudablemente ella está fuera de norma respecto a la medida que tomó”.
Además, la autoridad educacional indicó que si no funciona la primera medida, buscarán cupos, a través de otros sostenedores, para reubicar a los alumnos.