Acuerdos con tres secciones del río permiten mejorar condición del embalse para contar con más reservas y asegurar consumo humano, en medio de la crítica sequía que afecta a la Región de Valparaíso.
Esval informó que comenzó, con dos meses de antelación respecto a temporadas anteriores, la recarga del embalse Los Aromos, gracias al acuerdo que mantiene las Juntas de Vigilancia de la primera, segunda y tercera sección del río Aconcagua y en especial, con los canales Ovalle y Waddington, que toman el agua disponible producto de los esfuerzos de usuarios aguas arriba, para conducirla al embalse.
“Hoy este acuerdo es más relevante que nunca, pues estamos en una situación de sequía crítica: el embalse Los Aromos solo tiene 1,3 millones de metros cúbicos y es urgente que nos preparemos desde ya para la próxima temporada primavera-verano. Quiero agradecer especialmente a todos los usuarios de la cuenca, que han entendido la prioridad que tiene el consumo humano y nos han apoyado en este esfuerzo conjunto”, dijo el gerente general de Esval, José Luis Murillo.
Agregó que, con este convenio, “podremos seguir robusteciendo nuestro sistema productivo de agua potable para el Gran Valparaíso y el Litoral Norte. Esperamos llegar a un volumen acumulado de 15 millones de m3 en Los Aromos para agosto, y de esta manera, brindar una mayor seguridad hídrica a miles de familias de nuestra región. La sequía nos afecta hace más de una década y estamos convencidos de que la única forma de enfrentarla es trabajando juntos”.
El ejecutivo afirmó que el esfuerzo para enfrentar la sequía es continuo. “En los últimos años hemos invertido más de $300.000 millones en la optimización de nuestra infraestructura, de los que $50.000 millones son inversiones directas para reforzar nuestros sistemas con nuevas fuentes, pero también para contar una red más flexible, que nos permite administrar de mejor forma el agua y mantener la continuidad del suministro”, destacó.
Juntas de Vigilancia valoran trabajo
En tanto, los presidentes de las Juntas de Vigilancia de las tres primeras secciones del Aconcagua, resaltaron la alianza con Esval y el aporte que como organizaciones de usuarios del agua están realizando, a pesar de enfrentar una megasequía.
“Quiero destacar el compromiso y generosidad de nuestros asociados, que con gran esfuerzo se han sumado a este trabajo conjunto, porque sabemos que la prioridad es asegurar el agua para el consumo humano. Estamos conscientes de que Esval ha realizado diversas inversiones en los últimos años y esperamos que el Estado aporte también a una mejor gestión de la cuenca, sobre todo con los recursos necesarios para una mayor eficiencia en la distribución del recurso hídrico”, señaló Javier Crasemann, presidente de la I Sección del río.
En tanto, Mirko Yakasovic, de la II Sección, comentó que “entendemos la urgencia por la sequía y reiteramos nuestra voluntad de trabajar en alianza con Esval, ya que somos varios los actores que compartimos el uso del recurso. Confiamos en que las autoridades no nos dejen de lado y se concreten obras que ayuden a brindar una mayor seguridad hídrica”. Visión compartida por Walter Riegel, presidente de la III Sección, al señalar que “siempre hemos estado dispuestos a aportar para el consumo humano y hemos hecho los mayores esfuerzos, pese a que nuestra sección es la única que carece de obras concretas por parte de la autoridad. Todos los regantes se han comprometido para conducir agua hasta Los Aromos y están asumiendo un papel muy importante”.
Finalmente, ante la emergencia por el Coronavirus, Esval recordó la importancia de seguir las recomendaciones de salud, con un lavado constante de manos, pero -al mismo tiempo- pidió un consumo responsable, evitando actividades como el lavado de autos o riego de jardines, o algo tan simple como dejar corriendo el agua cuando no la usamos. Cuidar el agua es labor de todos.